viernes, 5 de octubre de 2007

"Sus documentados testimonios de encuentros con humanos de otros planetas, hacen de él uno de los personajes más fascinantes del siglo veinte y guia de referencia para una dedicación completa a éste tema."

Acontecimientos destacados

Una de las primeras fotos de un OVNI - 1948
Contacto con un piloto de OVNI humano, observado por seis personas - 1952
Multiples contactos 1962-1965
Películas de OVNIs por todo el Mundo 1955-1965
Giras mundiales 1959 y 1960
Audiencia con la reina Juliana, Holanda 1959
Medalla de oro honorífica del Papa Juan XXIII 1963
Numerosas apariciones públicas y por radio en USA 1952 - 1965


A finales de los años 1940, George Adamski fué una de las pocas personas que públicamente reveló sus encuentros y experiencias relacionadas con el fenómeno OVNI.

Debido a su dedicación y valentia para exponer sus experiencias, se convirtió personalmente en el responsable de dirigir un movimiento hacia el establecimiento de una mayor conciencia y educación general respecto a la existencia de vida extraterrestre.

George Adamski apoyó sus experiencias con excepcionales fotografias de OVNIs y filmaciones de películas en color de esas naves actuando por todo el mundo. Sus encuentros con humanos de otros planetas, documentados y testimoniados por otros, hacen de él uno de los personajes más fascinantes del siglo veinte y guia de referencia para una dedicación completa a éste tema.

Fué invitado a dar conferencias ante la realeza, dirigentes religiosos, instituciones políticas, grupos militares y comunidades científicas. Su gran interés en el espacio exterior y en el desarollo de la humanidad lo condujeron por todas partes del planeta. Guiado por el sentido común y su amor por la vida, valientemente exponia sus experiencias y pruebas ante todos los que desearan escucharlo. Con honestidad, abrió una luz, lógica y fundamentada sobre la realidad de la vida inteligente extraterrestre y de las frecuentes visitas a nuestro planeta.

2 comentarios:

nomesploraria dijo...

Se le intentó deshonrar con falaces acusaciones de fotografiar cacerolas y paellas colgadas de una caña de pescar... qué incrédulos! Y en mi ciudad no le han dedicado ningina calle.

Le Mosquito dijo...

Vida perra la del científico sacrificado.
Yo tuve un tío (en serio) que se llamó Marciano.
Marciano nació y murió en el siglo pasado en un pueblo de La Vera de Cáceres. Nunca vio platillos volantes. De hecho, pasaron muchos años antes de que viese un platillo, tan escasa como fue la comida en la posguerra.
Aunque siempre fue Marciano y Marciano murió, mi tío fue muy rojo. Ser muy rojo en la posguerra era motivo más que suficiente como para sacarte los colores (hay personas a quienes les agujerearon el pecho para sacarles los colores de golpe). Mi tío, por fortuna, fue respetado por otros hombres rojos que se vestían de azul para ver ovnis (patatas, garbanzos y poco más en aquellos platillos), de manera que mi tío, que tampoco sabía lo que era un papa ni una papa, sufrió, lo más, porque aquellos hombres azules le ponían verde.